Terapia


La terapia cognitivo-conductual se centra en los síntomas presentes y en la resolución de los problemas actuales del paciente.

Se trabajan las creencias, conductas, emociones e interacciones sociales responsables de mantener los problemas mediante una colaboración en equipo psicólogo-paciente.

Las terapias cognitivo conductuales ofrecen un tratamiento integral de los problemas con muy buena expectativa de éxito y un tratamiento para la prevención de recaídas.

Entre las distintas aplicaciones que tiene la Terapia Cognitivo-Conductual están:

·        Trastornos de ansiedad

·        Fobias

·        Depresión

·        Trastornos alimentarios

·        Autoestima

·        Falta de Habilidades Sociales

·        Trastornos de pánico

·        Estrés

·        Trastorno por estrés postraumático

·        Ataques de ira

·        Problemas de sueño

La TCC es un tratamiento suele durar entre seis semanas y seis meses. Consiste en sesiones individuales de tratamiento, a las que se suele asistir semanalmente. La cantidad de sesiones dependerá del trastorno y del compromiso con el tratamiento. 

Usted aprenderá a entender mejor sus problemas al desglosarlos para poder ver cómo se interrelacionan y cómo le afectan. 

Mediante técnicas estructuradas, aprenderá a cuestionar sus pensamientos negativos, además de reaccionar de modo más positivo; esto dará lugar a cambios conductuales que harán que usted se sienta mejor.

En ocasiones el trabajo en consulta se refuerza con algunas tareas para realizar en casa; por ejemplo, la lectura de algún material o/y actividades en las que usted pueda poner a prueba y practicar las técnicas que aprenda.  

El objetivo de la TCC es proporcionarle los conocimientos y herramientas necesarios para mejorar su calidad de vida.