La obesidad es acompañada, con
frecuencia, de la depresión y una puede ocasionar e influir sobre la otra.
La depresión puede causar y ser resultado
del estrés, el cual, a su vez, puede causar un cambio en sus hábitos
alimenticios y actividades. Muchas personas con problemas para recuperarse de
eventos repentinos o emocionalmente agotadores (por ejemplo, la pérdida de un
amigo cercano o de un miembro de la familia, dificultades en sus relaciones,
perder el trabajo o enfrentar un problema médico serio) comienzan, sin darse
cuenta, a comer demasiado de las comidas equivocadas o a abandonar el
ejercicio. En poco tiempo, esto se transforma en un hábito que es difícil
cambiar.
Trastorno alimentario compulsivo, una
conducta asociada con la obesidad y otras condiciones como la anorexia
nerviosa, es también un síntoma de depresión. Un estudio de personas obesas con
problemas de trastorno alimentario compulsivo reveló que el 51 por ciento
también tenía un historial de depresión grave. Investigaciones adicionales
muestran que las mujeres obesas que padecen de trastorno alimentario compulsivo
y que han sido víctimas de bromas a causa de su apariencia desarrollaron luego
insatisfacción con su cuerpo y depresión.
Lo que puede hacer:
Enfrentar la obesidad y problemas
similares de control de peso requiere adoptar nuevos hábitos que fomenten un
estilo de vida saludable. El enfoque siempre debe contemplar un cambio de
hábitos conductuales (por ejemplo,
una cesta de la compra saludable), físicos
(por ejemplo, incorporar deporte y actividades) y psicológicos (por ejemplo,
estrategias para afrontar las situaciones de estrés).
He aquí otros consejos de
ayuda para tomar acción contra la obesidad:
- Piense acerca de lo que come y por qué. Lleve un registro de sus hábitos alimenticios y escriba todo lo que come, el momento del día y la cantidad de comida. Registre también los pensamientos que tuvo en ese momento. ¿Estaba triste o molesto por algo? ¿O, acababa usted de tener una experiencia estresante y sentía la necesidad de comer "comida reconfortante"?
- Tenga en cuenta que, aunque tratar la obesidad ayuda a reducir los sentimientos de depresión, la pérdida de peso nunca tiene éxito si usted continúa agobiado por el estrés y otros sentimientos negativos. Puede que tenga que trabajar para resolver estos problemas antes de comenzar con un programa de pérdida de peso.
- Perder peso siempre es más fácil cuando se cuenta con el apoyo de sus amigos y familia. Intente involucrar a toda su familia para comer una dieta más saludable.
- Utilice el "sistema de amigos." Pídale a un amigo o miembro de su familia que esté "de turno" para ofrecerle apoyo moral cuando está tentado de alejarse de su nuevo estilo de vida.
- No se obsesione con los días cuando pierde la disciplina y no puede evitar comer más. A menudo, esto es un problema para las mujeres que tienden a ser muy duras consigo mismas al perder la disciplina. Vea qué pensamientos o sentimientos lo llevan a comer más en ese día en particular, y cómo puede sobrellevar de otra manera que no sea comiendo de más.
Fuente: http://www.apa.org/centrodeapoyo/obesidad.aspx