Hay personas a las que se les
nota su capacidad para contagiar buen humor y motivación. Muchas veces atraen
la atención de los demás (sin pretenderlo) simplemente por cómo se mueven y
cómo hablan, y otras, desde un papel discreto, hacen que el ambiente se llene
de optimismo y humor.
Detectar a estas personas que
transmiten energía positiva puede llegar a ser complicado, ya que muchas veces
son confundidas con gente con carisma en general. Esta última categoría es
mucho más amplia que la primera, e incluye incluso a los narcisistas y a las
personas con un alto nivel de psicopatía, las cuales utilizan su encanto
personal para manipular. Sin embargo, hay ciertos detalles que nos ayudan a
discernir unos casos del resto.
¿Cómo son las personas que
transmiten energía positiva?
A continuación, repasaremos
aquellas características psicológicas e as personas que transmiten energía
positiva.
1. No están constantemente alegres a solas
Cuando hablamos de "energía
positiva" en este contexto estamos utilizando una metáfora: no existen
pruebas de que existan las auras personales ni los "campos de
energía" que rodean a las personas dependiendo de sus características
mentales. Es, simplemente, una manera de hablar sobre el efecto que las
interacciones con ciertas personas tienen en los integrantes de un grupo o de
un círculo social.
Por consiguiente, las personas
con energía positiva lo son fundamentalmente en la interacción con las demás,
no cuando están solas. Eso significa que en una situación en la que estén
aisladas puede que su comportamiento no sea significativamente diferente al del
resto, y que no tiene por qué destacar; se trata de personas tan humanas como
las demás, y al igual que el resto experimentan tristeza, melancolía, etc.
2. Sonríen con gran facilidad
Aunque parezca extraño, mucha gente
evita sonreír, yua sea porque piensan que su sonrisa no es agradable o por una
simple cuestión de imagen personal que está muy interiorizada.
Las personas que transmiten
energía positiva carecen de esta clase de inhibiciones, y ese simple hecho hace
que su buen humor se contagie mucho más. De hecho, con las sonrisas ocurre algo
similar a lo que pasa con los bostezos, y a no ser que aparezca en un contexto
en el que exprese felicidad vengativa o burla, es muy probable que ver una haga
que automáticamente la imitemos gracias al efecto camaleón.
3. Son honestas
Si se le da tanto valor al buen
humor de las personas que transmiten energía positiva es porque todo el mundo
sabe que su felicidad es genuina. Es decir, que los momentos de alegría que
proporcionan están muy cotizados, porque en el momento en el que aparecen ya se
sabe que son verdaderos, y no una simple artimaña para caer bien.
Eso significa que estas personas
no modifican su encanto y su manera de expresar alegría dependiendo de con
quién estén tratando y, si lo hacen, será para fingir seriedad, no lo
contrario.
4. Disfrutan compartiendo su buen humor
Si alguien ve cómo sonríen, no
disimularán su expresión con una mueca. Si algo las hace felices, transmiten la
buena noticia a los demás, sin guardársela. Valoran la posibilidad de hacer que
su s círculos sociales se sientan mejor.
5. Evitan el estancamiento
Esto no significa que estén
constantemente embarcándose en nuevos proyectos impresionantes, sino que no
experimentan la vida como algo que todo el rato permanece igual, lo cual puede
llevar al estancamiento emocional. Disfrutan de los procesos de evolución
personal y no se quedan ancladas en los recuerdos acerca del pasado o de
hipotéticos tiempos mejores.
Este optimismo vital es parte de
esa energía positiva que se encargan de transmitir a todos los demás.
6. Ponen énfasis en el lado bueno de las cosas
Las personas que contagian
energía positiva saben que el modo en el que se vive la vida depende en buena
parte de en qué clase de aspectos decidimos centrar nuestra atención.
Por eso, de manera espontánea
quitan relevancia a los acontecimientos que pueden ser interpretados fácilmente
como accidentes desafortunados o desgracias, y construyen interpretaciones
alternativas a estas vivencias que resultan más esperanzadoras o incluso
humorísticas.
7. Expresan afecto
Son personas que no sienten
vergüenza al expresar afecto y amor no solo mediante las palabras, sino también
a través de las acciones y, especialmente, mediante el contacto físico (aunque
el grado en el que lo hacen depende de la cultura en la que vivan).
8. Se preocupan por los demás
Una parte de la empatía que
muestran estas personas consiste en interesarse de manera genuina por la vida
de los demás, lo cual implica que se preocupan por sus aciertos y fracasos y en
muchas ocasiones tratarán de ofrecer ayuda desinteresada simplemente para ver
cómo el prójimo se empieza a sentir mejor.
9. No prejuzgan
Las personas que contagian
energía positiva lo hacen por defecto con todo el mundo, asumiendo que todos
merecen sentirse alegres hasta que no se demuestre lo contrario. Por eso
expresarán su alegría incluso ante desconocidos, a los que tratan de manera
cómplice.
Fuente: https://psicologiaymente.net/personalidad/personas-transmiten-energia-positiva-rasgos